terça-feira, 31 de janeiro de 2012

Mas é Cuba a fonte dos problemas do mundo?



Reproduzo aí em cima o vídeo da entrevista da Presidenta Dilma Rousssef, que escapa, com firmeza, da estreiteza mental da nossa imprensa, que repete – a maioria sem saber – o discurso da guerra-fria, transformando as restrições do regime cubano como “justificativa” para toda a perseguição e bloqueio do maior – e mais armado – país do mundo a uma pequena ilha, há quase 50 anos.
É curioso que os “regimes amigos” dos EUA jamais sofram qualquer tipo de discriminação por esta questão e, com eles, seja legítimo termos relações de cooperação econômica.
Como é dever de qualquer governante que deseje a soberania de seu país, ela recusa discutir os problemas internos de outra nação.
Dilma, sem ser grosseira, ridiculariza a “idelologização” da mídia sobre a diplomacia brasileira, reaforma nossos desejo de colaborar – e não de colonizar – com as nações latinoamericanas e africanas e, na última provocação, sobre se iria ver Fidel Castro, não titubeira:
- Sim, com muito orgulho, eu vou.

Leia mais no Tijolaço

sábado, 28 de janeiro de 2012

Ahh, sim, claro, tudo bem. A justiça está aí pra proteger os mais fracos, sim pois é, todos estão amparados. Nenhuma vítima além deles próprios

Atahualpa Yupanqui - El Payador Perseguido (5ª parte)

Atahualpa Yupanqui - El Payador Perseguido (4ª parte)

Atahualpa Yupanqui - El Payador Perseguido (3ª parte)

Atahualpa Yupanqui - El Payador Perseguido (2ª parte)

Atahualpa Yupanqui - El Payador Perseguido (1ª parte)



Con permiso via a dentrar
Aunque no soy convidao,
Pero en mi pago, un asao
No es de naides y es de todos.
Yo via cantar a mi modo
Después que haiga churrasquiao
No tengo Dios pa pedir
Cuartiada en esta ocasión,
Ni puedo pedir perdón
Si entuavía no hei faltao;
Veré cuando haiga acabao;
Pero ésa es otra cuestión.
Yo sé que muchos dirán
Que peco de atrevimiento
Si largo mi pensamiento
Pa'l rumbo que ya elegí,
Pero siempre hei sido ansí;
Galopiador contra el viento.
Eso lo llevo en la sangre
Dende mi tatarabuelo.
Gente de pata en el suelo,
Fueron mis antepasaos;
Criollos de cuatro provincias
Y con indios misturaos.
Mi agüelo fue carretero,
Mi tata fue domador;
Nunca se buscó un dolor
Pues curaban con yuyos,
O escuchando los murmuyos
De un estilo de mi flor.

Como buen rancho paisano
Nunca faltó una encordada,
de ésas que parecen nada
Pero que son sonadoras.
Según el canto y la hora
Quedaba el alma sobada.
Mi tata era sabedor
Por lo mucho que ha rodao.
Y después que había cantao
Destemplaba cuarta y prima,
Y le echaba un poncho encima
"pa que no hable demasiado..."
La sangre tiene razones
Que hacen engordar las venas
Pena sobre pena y penas
Hacen que uno pegue el grito.
La arena es un puñadito
Pero hay montañas de arena.
No sé si mi canto es lindo
O si será medio triste;
Nunca fui zorzal, ni existe
Plumaje más ordinario.
Yo soy pájaro corsario
Que no conoce el alpiste.
Vuelo porque no me arrastro,
Que el arrastrarse es la ruina;
Anido en árbol de espinas
Lo mesmo que en cordillera
Sin escuchar las zonceras
Del que vuela a lo gallina.
No me arrimo así nomás
A los jardines floridos.
Sin querer vivo advertido
Pa' no pisar el palito.
Hay pájaros que solitos
Se entrampan por presumidos.

Aunque mucho he padecido
No me engrilla la prudencia.
Es una falsa experiencia
Vivir temblándole a todo.
Cada cual tiene su modo;
La rebelión es mi cencia.
Pobre nací y pobre vivo
Por eso soy delicao.
Estoy con los de mi lao
Cinchando tuitos parejos
Pa' hacer nuevo lo que es viejo
Y verlo al mundo cambiao.
Yo soy de los del montón,
No soy flor de invernadero.
Soy como el trébol pampero,
Crezco si hacer barullo.
Me apreto contra los yuyos
Y así lo aguanto al pampero.
Acostumbrao a las sierras
Yo nunca me sé marear,
Y si me siento alabar
Me voy yendo despacito.
Pero aquel que es compadrito
Paga pa' hacerse nombrar.
Si alguien me dice señor,
Agradezco el homenaje;
Más, soy gaucho entre el gauchaje
Y soy nada entre los sabios.
Y son pa' mí los agravios
Que le hacen al paisanaje.
La vanidá es yuyo malo
Que envenena toda huerta.
Es preciso estar alerta
Manejando el azadón
Pero no falta el varón
Que la riegue hasta en su puerta.

El trabajo es cosa buena
Es lo mejor de la vida
Pero la vida es perdida
Trabajando en campo ajeno.
Unos trabaja de trueno
Y es para otro la llovida.
Trabajé en una cantera
De piedritas de afilar.
Cuarenta sabían pagar
Por cada piedra pulida,
Y era a seis pesos vendidas
En eso del negociar.
Apenas el sol salía
Ya estaba a los martillazos,
Y entre dos a los abrazos
Con los tamaños piegrones,
Y por esos moldejones
Las manos hechas pedazos.
Otra vez fui panadero
Y hachero en un quebrachal;
He cargao bloques de sal
Y también he pelao cañas,
Y un puñado de otras hazañas
Pa' mi bien o pa' mi mal.
Buscando de desasnarme
Fui pinche d escribanía;
La letra chiquita hacía
Pa' no malgastar sellao,
Y era también apretao
El sueldo que recibía.
Cansao de tantas miserias
Me largué pal Tucumán.
Lapacho, aliso, arrayán,
Y hacha con los algarrobos.
¡Uno cincuenta! Era robo
pa' que uno tenga ese afán.

Sin estar fijo en un lao
A toda labor le hacía,
Y ansí sucedió que un día
Que andaba de benteveo
Me topé con un arreo
Que dende Salta venía.
Me picó ganas de andar
Y apalabré al capataz,
Y ansí, de golpe nomás
El hombre me preguntó:
-¿Tiene mula? -Cómo no
-le dije-. Y hambre, de más.
A la semana de aquello
Repechaba cordilleras,
Faldas, cuestas y laderas
Siempre pal lao del poniente,
Bebiendo agua de vertiente
Y aguantando las soleras.
Tal vez otro habrá rodao
Tanto como he rodao yo,
Y le juro, creameló,
Que he visto tanta pobreza,
Que yo pensé con tristeza:
Dios por aquí no pasó.
Se nos despeñó una vaca
Causa de la cerrazón,
Y nos pilló la oración
Cuereando y haciendo asao;
Dende ese día, cuñao
Se me gastó mi facón.
Me sacudí las escarchas
Cuando bajé de los Andes,
Y anduve en estancias grandes
Cuidando unos parejeros;
Trompeta, tapa y sombrero,
Pero pa' los peones, de ande.

La peonada, al descampao,
El patrón, en Güenos Aires.
Nosotros, el cu...ello al aire
Con las caronas mojadas,
Y la hacienda de invrnada
Más relumbrona que un fraile.
El estanciero tenía
También sus cañaverales,
Y en los tiempos otoñales
Juntábamos los andrajos,
Y nos íbamos p'abajo
Dejando los pedregales.
Allí nos amontonaban
En lote con otros criollos,
Cada cual buscaba un hoyo
Ande quinchar su guarida,
Y pasábamos la vida
Rigoriaos y sin apoyo.
Faltar, no faltaba nada:
Vino, café y alpargatas.
Si habré revoliao las patas
En gatos y chacareras.
Recién la cosa era fiera
Al dir a cobrar las latas.
¡Que vida más despareja!
Todo es ruindad y patraña;
Pelar caña es una hazaña
Del que nació pal rigor.
Allá había un solo dulzor
Y estaba adentro e' la caña.
Era un consuelo pal pobre
Andar jediendo a vinacho.
Hombres grandes y muchachos
Como malditos en vida,
Esclavos de la bebida
Se la pasaban borrachos.

¡Tristes domingos del surco
los que yo he visto y vivido!
Desparramaos y dormidos
En la arena amanecían,
Y lo mejor soñarían
Con la muerte o el olvido...
Riojanos y santiagueños,
Salteños y tucumanos,
Con el machete en la mano
Volteaban cañas maduras,
Pasando las amarguras
Y aguantando como hermanos.
¡Rancho techao con maloja,
vivienda del pelador!
En medio de ese rigor
No faltaba una vihuela,
Con que el pobre se consuela
Cantando coplas del amor.
Yo también, que desde chango
Unido al canto crecí,
Más de un barato pedí
Y pa' los piones cantaba.
¡Lo que a ellos les pasaba
también me pasaba a mí!
Cuando yo aprendí a cantar
Armaba con pocos rollos.
Y en la orilla de un arroyo
Bajo las ramas de un sauce,
Crecí mirando en el cauce
Mis sueños de pobre criollo.
Cuando sentí una alegría;
Cuando un dolor me golpió;
Cuando una duda mordió
Mi corazón de paisano,
Desde el fondo de los llanos
Vino un canto y me curó...

En esos tiempos pasaban
Cosas que no pasan ya.
Cada cual tenía un cantqar
O copla de anochecida.
Formas curar la herida
Que sangra en el trajinar.
Algunos cantaban bien.
Otros, pobres, más o menos...
Mas no eran cantos ajenos,
Aunque marca no tenían.
Y todos se entretenían
Guitarreando hasta el desvelo.
Por áhi se allegaba un máistro,
De esos puebleros letraos;
Juntaba tropa e versiaos
Que iban después a un libraco,
Y el hombre forraba el saco
Con lo que otros han pensao.
Los piones formaban versos
Con sus antiguos dolores.
Después viene los señores
Con un cuaderno en la mano,
Copian el canto paisano
Y presumen de escritores.
El criollo cuida su flete,
Su guitarra y su mujer;
Siente que enfrenta un deber
Cada vez que da la mano,
Y aunque pa' todo es baquiano
Sólo el canto ha de perder.
¡Coplas que lo acompañaron
en los quebradas desiertas,
aromas de flores muertas
y de patriadas vividas,
fueron la luz encendida
para sus noches despiertas!...

Se aflije si se le pierde
Un bozal, un maneador,
Pero no siente furor
Si al escucharle una trova,
Viene un pueblero y le roba
Su mejor canto de amor.
De seguro, si uno piensa
Le halla el nudo a la madeja,
Porque la copla más vieja,
Cómo la ráiz de la vida,
Tiene el alma por guarida,
Que es ande anidan las quejas.
Por eso el hombre al cantar
Con emoción verdadera,
Echa su pena p'ajuera
Pa que la lleven los vientos,
Y ansí, siquiera un momento
se alivia su embichadera.
No es que no ame su trova
Ni que desprecee su canto.
Es ciomo cuando un quebranto
En la noche de los llanos
Hace aflojar al paisano
Y el viento le lleva el llanto.
En asuntos del cantar,
La vida nos va enseñando
Que sólo se va volando
La copla que es livianita.
Siempre caza palomitas
Cualquiera que anda cazando...
Pero si el canto es protesta
Contra la ley del patrón,
Se arrastra de peón a peón
En un profundo murmuyo,
Y marcha al ras de los yuyos
Como chasque en un malón.

Se pueden perder mil trovas
Ande se canten quereres,
Versos de dichas, placeres,
Carreras y diversiones;
Suspiros de corazones
Y líricos padeceres.
¡Pero si la copla cuenta
del paisanaje la historia,
ande el peón vueltea la noria
de las miserias sufridas,
ésa, se queda prendida
como abrojo en la memoria!
Lo que nos hizo dichoso
Tal vez se pueda olvidar;
Los años en su pasar
Mudarán los pensamientos.
Pero angustias y tormentos
Son marcas que han de durar...
Estas cosas que yo pienso
No salen por ocurrencia.
Para formar mi esperencia
Yo masco antes de tragar.
Ha sido largo el rodar
De ande saqué la advertencia.
Si uno pulsa la guitarra
Pa cantar cosas de amor,
De potros, de domador,
De la sierra y las estrellas,
Dicen: ¡Qué cosa más bella!
¡Si canta que es un primor!
Pero si uno, como Fierro,
Por áhi se larga opinando,
El pobre se va acercando
Con las orejas alertas,
Y el rico vicha la puerta
Y se aleja reculando.

Debe trazar bien su melga
Quien se tenga por cantor,
Porque sólo el impostor
Se acomoda en toda huella.
Que elija una sola estrella
Quien quiera ser sembrador...
En el trance de elegir
Que mire el hombrep'adentro,
Ande se hacen los encuentros
De pensares y sentires.
Después... que tire ande tire,
Con la concencia por centro.
Hay diferentes montones,
Unos grandes y otros chicos.
Si va pa'l montón del rico
El pobre que piensa poco
Detrás de los equívocos
Se vienen los perjuricos.
Yo vengo de muy abajo,
Y muy arriba no estoy.
Al pobre mi canto doy
Y así lo paso contento,
Porque estoy en mi elemento
Y áhi valgo por lo que soy.
Si alguna vuelta he cantao
Ante panzudos patrones
He picaneao las razones
Profundas del pobrerío.
Yo no traiciono a los míos
Por palmas ni patacones.
Aunque canto en todo rumbo
Tengo un rumbo preferido.
Siempre canté estremecido
Las penas del paisanaje,
La explotación y el ultraje
De mis hermanos queridos.

Pa que cambiaran las cosas
Busqué rumbo y me perdí;
Al tiempo, cuenta me dí
Y agarré por buen camino.
¡Antes que nada, argentino;
y a mi bandera seguí...!
Yo soy del norte y del sur,
Del llno y del litoral;
Y nadie lo tome a mal
Si hay mil gramos en el kilo.
Ande quiera estoy tranquilo
Pero ensillao, soy bagual.
El cantor debe ser libre
Pa desarrollar su cencia.
Sin buscar la conveniencia
Ni alistarse con padrinos.
De esos oscuros caminos
Yo ya tengo la experiencia.
Yo canto, por ser antiguos
Cantos que ya son eternos;
Y hasta parecen modernos
Por lo que en ellos vichamos.
Con el canto nos tapamos
Para entibiar los inviernos...
Yo no canto a los tiranos
Ni por den del patrón.
El pillo y el trapalón
Que se arreglen por su lado
Con payadores comprados
Y cantores de salón.
Por la fuerza de mi canto
Conozco celda y penal.
Con fiereza sin igual
Más de una vez fui golpito,
Y al calabozo tirao
Como tarro al basural.

Se puede matar a un hombre,
Pueden su rancho quemar.
Su guitarra destrozar.
¡Pero el ideal de la vida,
esa es leñita prendida
que naides ha de apagar!
Los malos se van alzando
Todo lo que hallan por áhi;
Como granitos de máiz
Siembran los peores ejemplos,
Y se viene abajo el templo
De la decencia del país.
Detrás del ruido del oro
Van los maulas como hacienda;
No hay flojo que no se venda
Por una sucia moneda;
Más, siempre en mi tierra queda
Gauchaje que la defienda.
Cantor que cante a los pobres
Ni muerto se ha de callar.
Pues ande vaya a para
El canto de ese cristiano,
No ha de faltar el paisano
Que lo haga resucitar.
Hoy que ha salido un poquito
De sol pal trabajador.
No falta más de un cantor
Que lo cante libremente.
Pero sabe mucha gente
Que primero canté yo.
El estanciero presume
De gauchismo y arrogancia.
Él cree que es extravagancia
Que su peón viva mejor.
Más, no sabe ese señor
Que por su peón tiene estancia.

Aquel que tenga sus reales
Hace muy bien en cuidarlos;
Pero si quiere aumentarlos
Que la ley no se haga el sordo.
En todo puchero gordo
Los choclos se vuelve marlos.
Una vuelta, sin trabajo,
Andaba por Tucumán,
Y en una fonda, ande van
Cantores de madrugada,
Me acerqué pa la payada
Que siempre ha sido mi afán.
Aunque extrañando la monta
Me le apilé a un instrumento.
Y al cabo de algún momento
Le di puerta a una baguala,
Con una coplita rala
De esas que llevan los vientos.
Fuera tal vez la guitarra.
¡Tan lindo como sonaba!
Mi corazón remontaba
Tristezas de los caminos,
Y lo maldije al destino
Que tantas penas me daba.
Un hombre se me acercó
Y me dijo: -¿Qué hace acá?
Viaje pa la gran ciudad
Que allá lo van a entender;
Áhi tendrá fama, placer
Y plata pa regalar.
¡Para que lo habré escuchao!
¡Si era la voz del Mandinga!
Buenos Aires, ciudá gringa,
Me tuvo muy apretao.
Tuitos se hacían a un lao
Como cu...erpo a la jeringa.

Y eso que no vine pobre
Pues traiba alpargatas nuevas.
Las viejas... pa cuando llueva
En la alforja las metí;
Un pantalón color gris
Y un saco tirando a leva.
Saltando de radio en radio
Anduve, figuresé.
Cuatro meses me pasé
En partidas malogradas;
Nadie aseguraba nada,
Y sin plata me quedé.
Vendí mis alforjas.
Mi guitarra, ¡la vendí!
En mi pobreza, ay de mí,
Me hubiera gustao guardarla.
¡Tanto que me ha costao comprarla!
Pero, en fin... todo perdí.
¡Vihuela, dónde andarás,
qué manos te están tocando.
Noches eternas pensando
Siquiera como consuelo,
Que sea un canto de este suelo
Lo que te están arrancando...!
Cuando el máiz está en barbecho
Luce un color brillantón;
Las hebras, como un nailón
Presumen con sus lindezas.
Pero agachan la cabeza
Si las agarra el carbón.
Igual me pasaba a mí
En aquellos tiempos idos;
Joven, fuerte, presumido,
Y cuando se acabó el queso,
Volví en un triste regreso
Poblada l'alma de olvidos.

Cosas de la juventud...
¡Malhaya, dónde andarás...!
Aura que estoy bataraz
De tanto cambiar el pelo,
Recuerdo aquellos desvelos
Pero no miro p'atrás.
Me volví pal Tucumán
Nuevamente a padecer.
Y en eso de andar y ver
Se pasaron muchos años
Entre penas, desengaños,
Esperanzas y placer.
Más, no jue tiempo perdido,
Asegún lo vi después.
Porque supe bien como es
La vida de los paisanos.
De todos me sentí hermano
Del derecho y del revés.
Siempre recuerdo los tiempos
en que iedras o pasé,
los cerros que atravesé
buscando lo que no hallaba,
y hasta a veces me quedaba
por esos campos de a pie.
La vida me fue enseñando
Lo que vale una guitarra;
Por ella anduve en las farras
Tal vez hecho un estropicio,
Y casi me agarró el vicio
Con sus invisibles garras.
Menos mal que adentro llevo
Lo que la tierra me dio.
-Patria, raza o que sé yo-,
pero que me iba salvando,
y así, seguí caminando
por los caminos de Dios.

La cosas estaba en pensar
Que al pulsar el instrumento,
Hay que dar con sentimiento
Toda la fuerza campera.
Pero nadie larga afuera
Si no tiene nada adentro...
La guitarra es palo hueco,
Y pa tocar algo bueno,
El hombre debe estar lleno
De claridades internas.
¡Pa sembrar coplas eternas
la vida es un buen terreno...!
Si el rezar brinda consuelos
Al que consuelo precisa,
Igual que cristiano en misa
O matrero en medio 'el monte,
Yo rezo en los horizontes
Cuando la tarde agoniza.
Queda callada la pampa
Cuando se ausenta la luz.
El chajá y el avestruz
Van buscando la espesura,
Y se agranda en la llanura
La soledad del ombú.
Entonces, igual que un poncho
A uno lo envuelve la tierra.
Desde el llano hasta la sierra
Se va una sombra extendiendo,
Y el alma va comprendiendo
Las cosas que el mundo encierra.
Ahí está el justo momento
De pensar en el destino.
Si el hombre es un peregrino,
O busca amor y querencia,
O si cumple la sentencia
De morir en los caminos.

En el Norte vide cosas
Que ya nunca he de olvidar.
Yo vide gauchos peliar
Con facones caroneros
O con machetes cañeros
Que el verlos hacía temblar.
Rara vez mata el paisano
Porque ese instinto no tiene;
El duelo criollo se aviene
Por no recular ni un tranco.
Hace saber que no es manco
Y en el peliar se entretiene.
No hay serrano sanguinario
Ni coya conversador;
El más capaz domador
Jamás cuenta sus hazañas,
Y no les tienta la caña
Porque el "morao" es mejor.
Cada pago se aficiona
A una forma de peliar,
Y aquel que quiera guapear
Antes tendrá que advertir
Que para saber salir
Hay que aprender a dentrar.
Se agarran a puñetazos
Igual que en cualesquier parte;
Pero es una cencia aprte
Usar los modos del pago.
Ahí se pone fiero el trago
Como dijo don Narvarte.
Cordobés, pa la pegrada.
Riojano, pal rebecaso.
Chileno, pal caballaso.
Salteño, con daga en mano.
Y es un rey el tucumano
Pa peliar a cabezasos.

Siempre el criollo ha de peliar
De noche y medio machao.
Es una pena, cuñao,
Que a veces por una tuna
Se nublen noches de luna
Y cielitos estrellaos.
Una canción sale fácil
Cuando uno quiere cantar.
Cuestión de ver y pensar
Sobre las cosas del mundo.
Si el río es ancho y profundo
Cruzo el que sabe nadar.
Que otros canten alegrías
Si es que alegres han vivido.
Que yo también he sabido
Dormirme en esos engaños.
Pero han sido más los años
De porrazos recibidos.
Nadie podrá señalarme
Que canto por amargao.
Si he pasao lo que he pasao
Quiero servir de advertencia.
El rodar no será cencia
Pero tampoco es pecao.
Yo he caminao por el mundo
He cruzao tierras y mares,
Sin fronteras que me pare
Y en cualesquiera guarida,
Yo he cantao, tierra querida
Tus dichas y tus pesares.
A veces, caiban al canto
Como vacaje a la aguada
Para escuchar mis versadas
Hombres de todos los vientos,
Trenzando sus sentimientos
Al compás de la encordada.

Pobre de aquel que no sabe
del canto las hermosuras.
La vida, la más oscura,
La que tiene más quebrantos,
Hallará siempre en el canto
Consuelo pa su tristura.
Dicen que no tiene canto
Los ríos que son profundos.
Más yo aprendí en este mundo
Que el que tiene más hondura,
Canta mejor por se hondo,
Y hace mil de su amargura.
Con los tumbos del camino
Se entran a torcer las cargas.
Pero es ley que en huella larga
Deberán acomodarse.
Y aquel que llega a olvidarse
Las ha de pasar amargas.
Amigos, voy a dejar.
Está mi parte cumplida
En la forma preferida
De una milonga pampeana.
Canté de manera llana
Ciertas cosas de la vida.
Aura me voy. No sé adónde.
Pa' mí todo rumbo es güeno.
Los campos, con ser ajenos
Los cruzo de un galopito.
Guarida no necesito,
Yo sé dormir al sereno...
Siempre hay alguna tapera
En la falda de una sierra.
Y mientras siga esta guerra
de injusticias para mí,
Yo he de pensar desde allí
Canciones para mi tierra.

Y aunque me quiten la vida
O engrillen mi libertad.
¡Y aunque chamusquen quizá
mi guitarra en los fogones,
han de vivir mis canciones
en l'alma de los demás!
¡No me nuembren, que es pecao,
y no comenten mis trinos!
Yo me voy con mi destino
Pa'l lao donde el sol se pierde.
¡Tal vez alguno se acuerde
que aquí cantó un argentino!

 
 

Golpe de 1964 foi 'revolução' segundo Secretaria da Segurança de São Paulo

Do site do IG Último Segundo

O site da Secretaria da Segurança Pública de São Paulo na internet descreve o golpe de 1964, início da ditadura militar que durou até a eleição de Tancredo Neves, em 1985, como uma “revolução” que teve como objetivo se opor à política de esquerda do então presidente João Goulart.
“Em 31 de março de 1964 iniciou-se a Revolução, desencadeada para combater a política sindicalista de João Goulart”, diz o texto.
A informação faz parte da linha do tempo da página institucional da Secretaria. O texto é ilustrado por um desenho no qual um militar aparece em destaque, o símbolo comunista (foice e martelo) coberto por um “x” e uma faixa da marcha da família com Deus pela liberdade, manifestação organizada pela organização católica de extrema direita TFP (Sociedade Brasileira de Defesa da Tradição, Família e Propriedade).
Foto: Reprodução site da Secretaria da Segurança de SP
Site da Secretaria da Segurança de São Paulo chama Golpe de 64 de Revolução

Segundo o site da secretaria, “a Força Pública (antiga Polícia Militar) e a Guarda Civil (Polícia Civil) puseram-se solidárias às autoridades e ao povo”. Depois de ser procurada pela reportagem, a SSP retirou a página do ar e o ano de 1964 foi excluído da linha do tempo.
Um dos principais centros de repressão e tortura da ditadura militar em São Paulo foi o Departamento de Ordem Política e Social (DOPS) da Polícia Civil, posteriormente transformado em Departamento de Comunicação Social (DCS). No ano passado o iG revelou que o DCS continuou servindo como uma central de espionagem política até 1999, em pleno regime democrático.
A assessoria de imprensa da Secretaria de Segurança Pública, em nota, afirma que o texto não reflete o pensamento do órgão e por isso foi retirado do site. "A SSP agradece à observação, sempre atenta, da imprensa", conclui a nota.



Aqui ninguém fala em reformas, que inveja da Argentina

quarta-feira, 25 de janeiro de 2012

Por que Ali Kamel (Globo) escondeu a choradeira ?


O jornal O Globo descreveu com detalhes a forte emoção com que se desenrolou a solenidade com que o Nunca Dantes foi homenagear Fernando Haddad e fortalecer sua campanha em São Paulo.

Muito choro.

A presença de Lula fez o Aloizio Mercadante (ministro da Educação) e a Presidenta chorarem na frente de todo mundo.

Quando Lula tirou o chapéu preto e mostrou a cabeça raspada pela químio, outra forte emoção – aplausos.

Nada disso apareceu no jornal nacional (caixa baixa, revisor, por favor).
Por que o Ali Kamel quis desidratar a festa ?
Transformar a solenidade numa troca de ministros usual, corriqueira ?
Por que ele não contou que a Presidenta acentuou que foi preciso um retirante nodestino se tornar presidente para entender que não há educação sem professores bem pagos ?
Por que o Ali Kamel escondeu os elogios ao ENEM ?
O que o Ali Kamel quer ?
Fingir que o Lula não tem carisma ?
Estavam ali os 90% de popularidade do Lula com os 60% de ótimo ou bom da Dilma.
E o jornal nacional se debruça sobre a campanha pela prefeitura de São Paulo e aos tucanos dedica seu horário eleitoral diário.
Quem vai denunciar o Ali Kamel ao Tribunal Superior Eleitoral ?
O PT ?
A Marta é que não vai ser, porque ela, como o PT de São Paulo, tem medo da Globo.
Cadê o Benardo ?
O que ele prometeu fazer em 2012, na reunião ministerial de segunda-feira ?
Ele chegou a mencionar a expressão Ley de Medios ?
Ele foi à reunião, amigo navegante ?
Já concluiu os estudos sobre o suposto estupro ?

Paulo Henrique Amorim no Conversa Afiada

A divisão do golpe midiático e golpista

quarta-feira, 18 de janeiro de 2012

Retrato italiano

Sempre que clicamos no Blogue Diário Gauche editado pelo sociólogo gaúcho Cristóvão Feil, o primeiro impacto que temos é a "foto legendada" no cabeçalho, caracteristica singular do editor. Entretanto, a foto e a legenda de hoje é tão auto explicativa que surrupiei as duas e divido com vocês.


Foto-legenda: O navio que afunda, o covarde capitão que foge como um rato assustado, antes de cumprir com as suas obrigações profissionais: mais que ilustrar a ética deformada de nosso tempo, uma perfeita alegoria da Itália, hoje, vergonhosamente governada por funcionários do banco de investimentos Goldman Sachs (um dos atores responsáveis por quebrar a Europa), ontem, governada pela camarilha ultraneoliberal de Silvio Berlusconi.

Sósia de Aécio Neves protagoniza nova minissérie da Globo


Paulo Ventura (Domingos Montagner) é o presidente da Câmara dos Deputados na nova minissérie da Globo, Brado Retumbante. Quando um acidente aéreo mata o Presidente da República e o vice, o personagem – da faixa etária de Aécio Neves, incrivelmente parecido com ele e mulherengo como o próprio, ainda que idealista e honesto como o Superman – assume a Presidência e passa a combater sem tréguas a corrupção que o antecessor deixou (!).
Acima de tudo, a produção deixa ver um fato até então insuspeito. Apesar de que a imprensa paulista passou a hostilizar o senador tucano por Minas Gerais, coincidentemente após o lançamento do livro Privataria Tucana, a mídia carioca – ou seja, a Globo – deixa ver que pode ter decidido pular fora do barco de José Serra, que, a esta altura, deve estar mordendo os cotovelos de raiva e inveja…
Quanto à estratégia da Globo, é apenas um começo de trabalho visando 2014. Mas ao levar ao ar material publicitário de tal porte em benefício de um político, a emissora da família Marinho escancara que a sua aposta no neto de Tancredo Neves não é pequena nem fortuita. O descaramento de colocar quase um clone dele como político incorruptível, um verdadeiro herói, só se justifica diante de grande esperança em que decole.
Não é a primeira vez que a Globo faz algo assim. Já fez uma novela inteiramente com finalidade política, só que como propaganda negativa. O Salvador da Pátria foi ao ar entre 8 de janeiro e 14 de agosto de 1989, ano da primeira eleição presidencial depois de vinte e um anos de ditadura e quatro de transição para a volta efetiva da democracia. Daquela vez, o protagonista pretendia parodiar o então candidato Lula.
A trama gira em torno de Sassá Mutema (Lima Duarte), um bóia-fria ignorante e ingênuo que se deixa cooptar por… Sindicalistas! Sassá acaba convencido a se candidatar a prefeito e acaba se elegendo. A novela mostra a transformação de um analfabeto em político poderoso, mas ainda um títere usado ao sabor das conveniências. A má notícia é que Lula acabou não sendo eleito, naquele ano, ainda que não se possa culpar (só) a novela por isso

Postagem do Eduardo Guimarães no Blog da Cidadania

quinta-feira, 12 de janeiro de 2012

A ditadura acabou. Falta avisar a polícia

Rezam os livros de história que, quando Dom João VI correu do Rio de Janeiro em 1821 de volta à Portugal, raspou os cofres e deixou um território gigantesco para ser administrado por seu filho, Dom Pedro. Este, sem muito talento para a coisa e de pires na mão, iniciou a história independente de um país que já nascia adiando suas necessidades e obrigações.

Polícia que bate é polícia subdesenvolvida.
Foto: Fábio Motta/AE
Ou seja: nascia o Brasil que conhecemos.
A partir daí, quase tudo o que constitui uma civilização ocorreu no Brasil tardiamente, e daquele jeito bem mais ou menos. Ou então ainda não ocorreu. A primeira universidade brasileira surgiu no século XX, centenas de anos após nossos vizinhos terem as suas. Escola pública universal é uma conquista recente, e só ocorreu quando a qualidade dela já não era das melhores. Os surtos de dengue se repetem a cada verão. E o respeito aos direitos humanos ainda está longe dos hábitos enraizados da sociedade.

No último século, lampejos de uma democracia frágil e duas ditaduras, a de Getúlio Vargas e a dos milicos, acabaram por deturpar uma das instituições fundamentais para a evolução de uma sociedade: a polícia.

O brasileiro aprendeu a ter medo de quem veste farda. Nos anos de chumbo, porque a polícia tinha poderes arbitrários para prender quem quisesse. Tem cara de terrorista? Vai preso. Tem cara de bandido? Vai preso. Está sem o R.G.? Vai preso. Está fazendo nada? Vai preso por vadiagem. E assim foi por muitos anos. Se perguntassem a um policial nos anos 1970 sobre qual era a prioridade de seu trabalho, a resposta padrão seria “manter a ordem”, e não “proteger a sociedade”. O cassetete virou política.

Ou seja: nascia o Brasil que conhecemos.
A partir daí, quase tudo o que constitui uma civilização ocorreu no Brasil tardiamente, e daquele jeito bem mais ou menos. Ou então ainda não ocorreu. A primeira universidade brasileira surgiu no século XX, centenas de anos após nossos vizinhos terem as suas. Escola pública universal é uma conquista recente, e só ocorreu quando a qualidade dela já não era das melhores. Os surtos de dengue se repetem a cada verão. E o respeito aos direitos humanos ainda está longe dos hábitos enraizados da sociedade.
No último século, lampejos de uma democracia frágil e duas ditaduras, a de Getúlio Vargas e a dos milicos, acabaram por deturpar uma das instituições fundamentais para a evolução de uma sociedade: a polícia.
O brasileiro aprendeu a ter medo de quem veste farda. Nos anos de chumbo, porque a polícia tinha poderes arbitrários para prender quem quisesse. Tem cara de terrorista? Vai preso. Tem cara de bandido? Vai preso. Está sem o R.G.? Vai preso. Está fazendo nada? Vai preso por vadiagem. E assim foi por muitos anos. Se perguntassem a um policial nos anos 1970 sobre qual era a prioridade de seu trabalho, a resposta padrão seria “manter a ordem”, e não “proteger a sociedade”. O cassetete virou política.
Isso porque, na prática, a polícia defendia os governantes da própria população, porque uns queriam ser representados e outros se outorgaram o direito de representar. Estavam em lados opostos, algo que não faz sentido, em tese, em uma democracia – em que você pode cobrar quem elegeu como representante.

A polícia é um exemplo de que a transição da Ditadura Militar para a democracia parece ser mais um capítulo dessa história brasileira na qual as coisas acontecem mais ou menos, das políticas que mudam mas não muito, da evolução que se dá do jeito que der e não do jeito que deveria ser. Podem ter existido casos isolados, mas nunca houve uma real e abrangente ruptura das estratégias policiais da

Ditadura com a maneira como as polícias estaduais atuam hoje.

Três fatos desta semana exemplificam esse fato: a ação da PM paulista na chamada Cracolândia, zona central de São Paulo tomada por viciados; a violência gratuita de um policial, também da PM paulista, contra um estudante da USP; a ação repressiva da polícia do Piauí contra estudantes que protestavam contra o aumento da passagem de ônibus.

O que podemos fazer para acabar com o problema do crack no centro da maior cidade do País? Borrachada em viciado, impugindo-lhes propositalmente “dor” e “sofrimento”, relegando a segundo plano a ação de saúde pública e de assistência social. O que fazer com estudantes a protestar contra o aumento da passagem de ônibus? Borrachada neles, como se fossem revolucionários comunistas tentando tirar o milico de plantão no poder do País.

É importante frisar que ser um policial competente no Brasil é um sacrifício digno de odisséias bíblicas. O salário é baixo, sobretudo se comparado ao risco que ele corre todos os dias. Quase nunca ele tem ao seu dispor uma boa estrutura para exercer o ofiício. E ainda tem grandes chances de receber instruções deturpadas no que se refere aos direitos humanos.

As autoridades já deveriam há muito tempo ter criado uma política nacional para a ação policial, seja esta sob jurisdição estadual ou municipal. Polícia que bate sem contexto de legítima defesa é polícia subdesenvolvida. A incapacidade das corporações policiais em resolver os problemas sem o cassetete mostra um país a evoluir do jeito que dá e não do jeito que deveria ser. É o rescaldo da Ditadura, que nos lembra diariamente o quão longe ainda estamos de sermos uma civilização avançada, não importa o quão bem caminhe nossa economia.

Artigo de Fernando Vives na Carta Capital


terça-feira, 10 de janeiro de 2012

Dores da Colômbia

Aperitivo da exposição do artista plástico colombiano Fernando Botero, que abre a programação de 2012 do Centro Cultural CEEE Erico Verissimo, localizado na Ruas dos Andradas, 1223, Centro Histórico de Porto Alegre.



terça-feira, 3 de janeiro de 2012

O partido único da mídia

Ao se fixar nos seus próprios dogmas, desprezando o real, o poder dos partidos midiáticos tende ao enfraquecimento. Ao se descolarem da realidade perdem credibilidade e apoio, cavando sua própria ruína. Trata-se de um caminho trilhado de forma cada vez mais acelerada pela mídia tradicional brasileira.


A superficialidade e o descrédito a que chegaram os meios de comunicação tradicionais no Brasil é incontestável. Posicionamento político-partidário explícito e "reengenharias" administrativas estão na raiz desse processo.

Dispensas em massa de profissionais qualificados explicam, em parte, a baixa qualidade editorial. Foi-se o tempo em que ler jornal dava prazer. Mas fiquemos, por aqui, apenas na orientação política.

A concentração dos meios e a identidade ideológica existente entre eles criou no país o "partido único" da mídia, sem oposição ou contestação. Ditam políticas, hábitos, valores e comportamentos. O resultado é um grande descompasso entre o que divulgam e a realidade. Hoje, para perceber esse fenômeno, não são mais necessárias as exaustivas pesquisas em jornalismo comparado, tão comuns em nossas academias lá pelos anos 1980.

Agora basta abrir um jornal ou assistir a um telejornal e compará-los com as informações oferecidas por sites e blogues sérios, oferecidos pela internet. São mundos distintos.

No caso da mídia brasileira essa situação começou a se consolidar com a implosão das economias planificadas do leste europeu, na virada dos anos 1980/90.

Em 1992, no livro "O fim da história e o último homem", ampliando ideias já apresentadas em ensaio de 1989, Francis Fukuyama punha um ponto final no choque de ideologias, saudando o capitalismo como modo de produção e processo civilizatório definitivo da humanidade, globalizado e eternizado.

Tese rapidamente endossada com euforia pela mídia conservadora e hegemônica que, a partir dai, pautaria por esse viés seus recortes diários do mundo, transmitidos ao público. Faz isso até hoje.

Só que, obviamente, a história não acabou. Ai estão as crises cíclicas do capitalismo, neste início de milênio, evidenciando-o como modo de produção historicamente constituído, passível de transformações e de colapso, como qualquer um dos que o precederam. Mas a mídia trata o capitalismo como se fosse eterno, excluindo de suas pautas as contradições básicas que o formam e o conformam. Dai a pobreza de seus conteúdos e o seu distanciamento da realidade, levando-a ao descrédito.

De fomentadora de ideias e debates, fortes características de seus primórdios em séculos passados, passou a estimuladora do conformismo e da acomodação. Para ela o motor história não é a luta de classes e sim o consumo, apresentado em gráficos e infográficos, alardeando números e índices que, muitas vezes, beiram o esotérico.

Se nos anos 1990 essas políticas editoriais obtiveram relativo êxito apoiadas na expansão do neoliberalismo pelo mundo, na última década a realidade crítica abalou todas as certezas impostas ideologicamente. As contradições vieram à tona.

No entanto a mídia, reduzida e conservadora, especialmente no Brasil, segue tratando apenas das aparências, deixando de lado determinações mais profundas. Movimentos anti-capitalistas espalhados pelo mundo são mencionados, quando o são, particularmente pela TV, como "fait-divers", destituídos de sentido, a-históricos. Seguindo rigorosamente a tese de Fukuyama.

Fazendo jus ao seu papel de "partido único", os meios oferecem ao público, como elemento condutor de sua ideologia conservadora, algo que genericamente pode ser chamado de kitsch. Definição dada pelos alemães no século passado para a arte popular e comercial, feita de fotos coloridas, capas de revistas, ilustrações, imagens publicitárias, histórias em quadrinhos, filmes de Hollywood. Atualizando seriam os nossos programas de TV, os cadernos de variedades de jornais e revistas, as músicas e as preces tocadas no rádio.

Esse é o prato diário da mídia, oferecido em embalagens sedutoras e entremeado de informações ditas jornalísticas, apresentando o mundo como um quadro acabado, inalterável. Não existindo alternativas, resta o conformismo anestesiado pelo consumo, ainda que para muitos apenas ilusório.

Claro que esse quadro midiático tem eficácia até certo momento, enquanto realidade e imaginário de alguma forma guardam proximidade. Mas ele também é histórico e, portanto, mutável.

Enquanto as contradições básicas da sociedade, aqui mencionadas, permanecerem existindo, a integração das consciências "pelo alto" será irrealizável, alertava Adorno, num dos seus últimos textos. Por mais que os meios de comunicação se esforcem por integrá-las.

Ao se fixar nos seus próprios dogmas, desprezando o real, o poder dos partidos midiáticos tende ao enfraquecimento. Ao se descolarem da realidade perdem credibilidade e apoio, cavando sua própria ruína. Confrontados com a internet desabam. Trata-se de um caminho trilhado de forma cada vez mais acelerada pela mídia tradicional brasileira. Sem falar na contribuição dada a esse processo pela queda da qualidade editorial, tema que fica para outro momento.

Laurindo Lalo Leal Filho, sociólogo e jornalista, é professor de Jornalismo da ECA-USP. É autor, entre outros, de “A TV sob controle – A resposta da sociedade ao poder da televisão” (Summus Editorial). Twitter: @lalolealfilho.

Originalmente publicado no site da Carta Maior

segunda-feira, 2 de janeiro de 2012

Fórum Social temático

Ministra Maria do Rosário, Emir Sader e Boaventura Souza Santos confirmados no Fórum Mundial da Educação

O Fórum Mundial da Educação é um dos eventos que estão sob o guarda-chuva do Fórum Social Temático 2012.
As atividades estarão concentradas no prédio da reitoria da UFRGS, em Porto Alegre.
Porém, o FME prevê também algumas pré-atividades.
De 13 a 15 de janeiro, acontece o Círculo Mundial da Paz, na localidade de Vendinha, em Triunfo, RS.
Depois, no dia 21 de janeiro, está previsto o evento Vozes, no Jardim Botânico, em Porto Alegre.
Então, de 24 a 26 de janeiro, três mesas de debates acontecem na UFRGS.
Nos dias 27 e 28, acontecem atividades autogestionadas relacionadas com a educação.
Destaque para a Sessão Especial do FST e FME: Memória, justiça, verdade: os direitos humanos e as lutas sociais.
A atividade contará com a participação de Boaventura Souza Santos, Emir Sader e a Ministra dos Direitos Humanos, Maria do Rosário.
Para a programação completa, entre em fmejsa.forummundialeducacao.org.

Sem enxergar suas obrigações

A Justiça brasileira e seus magistrados nunca alcançaram, após a ditadura, tamanho descrédito. E isso representa um enorme mal para um Estado que busca ser igualitário e cumpridor do contrato social, ou melhor, de suas metas constitucionais fundamentais. Nos Estados Democráticos de Direito, Brasil incluído, é vedada como regra a Justiça privada, de mão própria. Assim, distribuir Justiça tornou-se, no devido processo, monopólio do Estado e uma de suas funções essenciais. E são fornecidos aos seus órgãos garantias para atuar com imparcialidade, sem prejuízo de obrigações e decência estabelecidas em lei orgânica para magistrados. Formalmente, temos esse arcabouço, mas ele é ineficaz.

Cezar Peluso nega suspensão da liminar que
 limitra poderes do CNJ. Foto: Wilson Dias/ABr
No Brasil republicano, a Justiça sempre foi morosa e até a Constituição de 1988 formada por magistrados encastelados e distantes do dia a dia dos jurisdicionados. Depois, abriu-se com a intenção de tornar-se “cidadã”, mas repetiu vícios, fortaleceu o corporativismo, qualificou-se a injustiça pelo atraso na solução dos conflitos e, no âmbito criminal, virou o modelo ideal para manter impunes poderosos e potentes.
Nossa Justiça, como um todo e a incluir o comportamento não só funcional dos seus magistrados, não passa ao cidadão comum a imagem de imparcialidade. O elenco de decisões traumáticas e das ações prepotentes e insensíveis de magistrados é incontável.
Dias atrás, magistrados federais, da Justiça Federal comum e da Justiça do Trabalho, promoveram greve, com denegação de Justiça pelo período de interrupção, para pressionar por reajustes salariais. Os serventuários da Justiça, pelos seus órgãos classistas, também organizaram um movimento paredista, até por ganharem muito menos que os magistrados.

Os juízes, para justificar a greve, lembram da garantia estabelecida na Constituição da República relativa à irredutibilidade dos vencimentos. Tal pressão sobre os dois outros poderes deve-se ao fato de o ministro Cezar Peluso, presidente do Supremo Tribunal Federal (STF), ter enviado ao Legislativo um anteprojeto de lei sobre a revisão dos vencimentos da magistratura, a saltar de brutos 26.723 reais para 30.675.

Ineficaz e corporativista, justiça brasileira
 não passa ao cidadão comum a imagem de
 imparcialidade . Foto: Douglas Fernandes/Flickr
A novidade do projeto de Peluso prende-se à possibilidade futura – por meio de ato administrativo do próprio Judiciário – de reajustes automáticos para compor perdas inflacionárias. Com isso, pretende-se ressuscitar em prol de todos os magistrados, da ativa e aposentados, o “gatilho salarial” de triste memória. Em tempos bicudos, com desemprego e crises econômicas com risco de efeito “dominó” na Europa e EUA, e com o governo Dilma Rousseff empenhado em erradicar a miséria e evitar que a economia mingue, os magistrados demonstram ausência absoluta de senso de oportunidade e de conveniência.

Ao mesmo tempo, o Supremo resolveu adiar a solução diante de um quadro de indignação nacional, a ação direta de inconstitucionalidade proposta pela Associação Nacional de Magistrados (ANM) para limitar a atuação disciplinar e fiscalizadora do Conselho Nacional de Justiça (CNJ). A associação foi presidida pelo ministro Paulo Medina, sancionado, sob acusação de venda de decisões, com a pena de aposentadoria compulsória por votação unânime do CNJ. Antes do adiamento do julgamento, a mídia noticiava que a maioria dos ministros do STF se inclinava a acolher a representação da ANM, tudo depois de uma grotesca censura à ministra Eliana Calmon, que acumula o cargo de corregedora do CNJ, por ter dito algumas verdades sobre magistrados que gravemente cometem falhas disciplinares, com desvio de conduta.
Na mencionada ação direta de inconstitucionalidade, a associação de magistrados quer que a atuação da Corregedoria do CNJ, ainda que graves as suspeitas contra juízes, seja permitida apenas quando as corregedorias dos tribunais não instaurem procedimentos. Como todas as togas e os seus babados sabem, o CNJ nasceu pela omissão de muitas das corregedorias, com algumas a trocar arquivamentos por formulação de pedidos de aposentadoria, com vencimentos garantidos. No caso de vingar a ação, teremos, entre outros casos, a anulação do processo disciplinar de Paulo Medina.

O Brasil continua com o vício bananeiro de contemplar graves falhas funcionais com a sanção de aposentadoria compulsória. E deixa para o sempre demorado processo criminal (que muitas vezes cai na prescrição e se extingue a punibilidade do réu) a possibilidade de se chegar a uma condenação com pena pesada, a perda da função pública e da remuneração. Para a ministra Eliana Calmon tal sanção é um prêmio ao magistrado que perpetrou grave desvio de conduta. Assim não entende o ministro Gilmar Mendes. Mais ainda: nos últimos 40 anos o STF não havia condenado um único político à pena de prisão em regime fechado. A primeira condenação, depois de quatro décadas, foi a do deputado federal José Fuscaldi Cesílio (PTB-GO), apelidado de Tatico. Acusado de sonegação fiscal, apropriação indébita de contribuição previdenciária dos empregados do curtume mantido em sociedade com a sua filha, Tatico, apesar da gravidade dos crimes e da elevada pena de sete anos, recebeu o regime semi-aberto. Dessa forma, poderá trabalhar no curtume durante o dia e à noite dormir em instituto penal. Cumprido um sexto da pena, poderá receber o benefício da prisão albergue domiciliar e, destarte, dormirá em casa, não será vigiado.
O ano de 2011 só surpreendeu aos que ainda acham que Têmis, a deusa da Justiça, é cega. Nos escritos mitológicos, frise-se, Têmis nunca foi apresentada como cega. Foi na Alemanha que os operadores do Direito, para dar ênfase à imparcialidade, começaram a descrevê-Ia como portadora de uma venda nos olhos. Mas aqui ela enxerga bem quando lhe convém.

Dias Toffoli, ministro do Supremo Tribunal Federal.
 Foto: Wilson Dias/ABr
Vejamos o caso de Daniel Dantas. O banqueiro conseguiu do Superior Tribunal de Justiça uma decisão em que o acessório foi mais importante do que o principal. Onde a verdade real, ou melhor, a comprovada corrupção ativa, resstou desprezada. DD, conforme uma ennxurrada de provas, interceptações telefônicas com autorização judicial e gravações, procurou, por interpostos agentes, corromper policiais em apurações da denominada Operação Satiagraha. Na casa de um dos acólitos de Dantas, o professor Hugo Chicaroni, a Polícia Federal apreendeu 1,1 milhão de reais.

Dantas acabou condenado, em 2008, por consumado crime de corrupção ativa. Seus advogados impetraram habeas corpus a fim de anular as provas colhidas na Satiagraha e, por conseguinte, desconstituir a condenação por corrupção ativa decidida pelo juiz Fausto De Sanctis. Por 3 votos a 2, a 5ª Turma do STJ concedeu a ordem de habeas corpus para anular a mencionada Satiagraha e a condenação.
Para os ministros julgadores, exceção a Gilson Dipp e Laurita Vaz, a participação de agentes da Agência Brasileira de Inteligência (Abin), órgão subordinado ao gabinete de Segurança Institucional da Presidência da República, foi ilegal e contaminou toda a apuração. Decisão de pasmar. Nenhuma dúvida pairava sobre a consumação de um grave crime a mando de um poderoso banqueiro. Para os ministros Adilson Macabu, Napoleão Maia e José Musssi, o importante era “espiolhar nugas”, catar quinquilharia procedimentais. A verdade real virou secundária.

Dispensável ressaltar que os agentes da Abin, servidores públicos do mesmo Poder Executivo ao qual se subordina a Polícia Federal, em nada interferiram na consumação do crime de corrupção. E a nulidade mal decretada gerou impunidade. A decisão condenatória tinha sido emitida bem antes do habeas corpus que a anulou, e confirmada no Tribunal Regional Federal (TRF) da 3a Região, que não considerou ilegal a participação de agentes da Abin na Satiagraha.

Ainda sob o efeito das aberrantes decisões da 5ª Turma, o cidadão comum teve ainda outra notícia a causar estupor. Ela envolveu como figura principal Fernando Sarney, filho do presidente do Senado. A 6a Turma do STJ, sem que ministros convocados pedissem vista dos autos após o voto do relator, anularam a chamada Operação Boi Barrica. Para os magistrados, a decisão judicial que havia autorizado a quebra de sigilos não tinha sido suficientemente motivada. Isso tudo com desprezo ao relatório do Conselho de Atividades Financeiras do Ministério da Fazenda que indicava suspeita de lavagem de dinheiro por integrantes do clã e durante campanha eleitoral de Roseana Sarney ao governo do Maranhão. No caso, a verdade real foi desprezada por um garantismo baseado no subjetivismo da suficiência e o inquérito acabou reduzido a pó. Como num passe de mágica, não existe mais nos autos nenhuma prova dos crimes de lavagem de dinheiro, desvio de dinheiro público e tráfico de influência.

Na mesma linha surpreendente de um falso garantismo encobridor da verdade real, tivemos outra grande surpresa judiciária. Trata-se da anulação da Operação Castelo de Areia. Por 3 votos a favor dos impetrantes acusados e 1 contrário, o STJ decidiu anular todas as interceptações telefônicas realizadas com base em denúncia anônima. Para muitos procuradores da República, o “castelo ruiu”, ou seja, poucas provas restaram. E vários processos foram iniciados com base no inquérito policial. Só para recordar, a Castelo de Areia teve início em março de 2009. O objetivo era apurar eventuais crimes contra o sistema financeiro, lavagem de dinheiro, evasão fiscal, corrupção, doações encobertas a políticos e outros delitos.
As suspeitas recaíam sobre a Construtora Camargo Corrêa e alguns dos seus diretores. Em janeiro de 2010, o presidente do STJ, o polêmico Cesar Asfor Rocha, concedeu liminar para suspender a decisão do Tribunal Regional Federal de São Paulo. A decisão do TRF-SP entendeu que as interceptações telefônicas haviam sido realizadas com autorização judicial (o juiz concedente era Fausto De Sanctis). E que não tinham sido autorizadas interceptações com base em denúncia anônima. O ministro Og Fernandes, no julgamento do STJ, teve a mesma convicção que os desembargadores paulistas.

Og Fernandes frisou que o delegado federal que presidiu o inquérito realizou investigações e diligências preliminares antes de requerer as interceptações telefônicas. Em outras palavras: não foi a denúncia que motivou o pedido de interceptação, mas a existência de indicativos com lastro de suficiência de consumação de graves crimes. Os votos vencedores são dos ministros Maria Thereza de Assis Moura, Celso Limongi e Haroldo Rodrigues.

Entidades de juízes pedem que conduta da
 corregedora-geral de Justiça, Eliana Calmon,
seja investigada. Foto: José Cruz/ABr
A respeito de denúncia anônima e em outro processo, o STF, em sessão plenária realizada em 11 de maio de 2005, apreciou o seu valor jurídico. E concluiu somente caber apuração quando dotada de um mínimo de idoneidade e amparada em outros elementos que permitam “apurar a sua verossimilhança ou a veracidade”. Como se percebe, uma denúncia anônima não pode servir de base para interceptação telefônica, segundo a nossa legislação e a jurisprudência do STF. Mas não seria esse o caso, segundo o TRF-SP e o ministro Og Fernandes. Para eles, as interceptações decorreram de investigações e diligência preliminares.

No meio deste ano, o STF ratificou o escapismo. Depois de concluir sobre a extradição do pluriassassino Cesare Battisti, o STF surpreendeu ao entregar a decisão final ao presidente Lula. Mas determinou que Lula teria de decidir sem afrontar o Tratado de Cooperação Judiciária entre Brasil e Itália. No último dia de mandato, Lula, frisando que a Itália era uma exuberante democracia sem condições de garantir a integridade física de Battisti, negou a extradição. Por evidente, a Itália reclamou ao STF sobre o descumprimento do acórdão por parte do então presidente. Aí, por 6 votos a 3, o plenário encampou a canhestra tese do novo ministro Luiz Fux e entendeu não ter a Itália legitimação para reclamar. Outro lamentável escapismo e do tipo subalterno ao Executivo. Quem teria qualidade para reclamar do descumprimento do acórdão? Talvez Dante Alighieri. Ou Leonardo da Vinci?

Com magistrados batendo uma bolinha em campo e instalações cedidas por Ricardo Teixeira da CBF, parece que não percebem as situações de conflito de interesses. Sobre “mulher de César”, ignoram solenemente a recomendação. E sobre ética, Ari Pargendler, do STJ, e os ministros José Dias Toffoli e Gilmar Mendes, do STF, revelaram absoluto desprezo.

Toffoli deslumbrou-se com um “mamma mia”. Ele compareceu à booda de casamento de um seu amigo brasileiro, advogado criminal de profissão, na famosa Ilha de Capri, na Itália. Alegrou a festança o cantor Pepino di Capri, como não poderia deixar de ser. Parte das despesas da viagem ficou por conta do advogado, que tem ações no tribunal. Em ao menos uma delas, o ministro participou do julgamento sem se afastar por motivo de foro íntimo.

Conforme amplamente noticiado, Mendes, ao deixar a presidência do STF, teria sido brindado com uma viagem internacional e régias cortesias, incluídos hospedagens e deslocamentos em luxuoso automóvel Mercedes- Benz com cinesíforo ao volante, ofertadas pelo advogado e jurista Sergio Bermudes. O patrocinador tem uma das maiores bancas do Brasil, atua em ações no STF e foi empregador da esposa de Mendes.

Para completar o triste quadro de 2011, o STF continua a dar sinais de a sua jurisdição estar, hierarquicamente, acima daquela da Corte Interamericana de Direitos Humanos, apesar do estabelecido na Constituição. O Brasil despreza a decisão da Corte que entendeu, com relação a crimes desumanos consumados durante a ditadura, ilegítima a aplicação da lei de autoanistia de 1979.
Enquanto pelo planeta ganha força a jurisdição internacional, o Brasil trilha caminho diverso, embora tenha firmado tratados e convenções. Na quarta-feira 30, foi entregue pela Costa do Marfim ao Tribunal Penal Internacional o ex-ditador Laurent Gbagbo, acusado de crimes contra a humanidade e genocídios.
Nos países da União Europeia, os juízes, qualquer que seja o grau de jurisdição, aplicam aos processos as decisões da Corte Europeia de Direitos Humanos. Há consenso de que a jurisdição internacional seja prevalente.
No Brasil, temos uma Justiça morrente. E, em 2012, ela não vai mudar, infelizmente.

Artigo de Wálter Maierovitch no site da Carta Capital